Con el buen tiempo, estar al aire libre es un placer. Con el sol y las altas temperaturas apetece salir a disfrutar de la naturaleza en cuanto tenemos un rato libre: a la playa, a la piscina, al monte… o sin irnos tan lejos: es el mejor momento para disfrutar del jardín, si es que somos afortunados de contar con uno. Una solución para poder aprovechar nuestra parcela al máximo durante el año o darle más utilidad es montar una carpa para jardín.

Los espacios de  restauración son conscientes del aliciente de las carpas para jardín, lo que posibilita la celebración de bodas, bautizos y comuniones en una atmósfera diferente, en un paraje natural privilegiado y al mismo tiempo, protegidos. Mención especial merecen las carpas transparentes para estos escenarios. Pero, ¿por qué no una carpa para jardín en un espacio privado?

¿Qué puedo hacer con una carpa para jardín?

Esta estructura a medida de necesidades y presupuesto abre las puertas a hacer de nuestro jardín una extensión más de la casa: como invernadero para plantas y flores, para montar una piscina en su interior que posibilite su uso más allá del verano, como solución de almacenamiento, como sala rústica para realizar comidas y celebraciones, para guardar animales, para protegernos del clima tanto de las lluvias primaverales, los calores estivales o el frío y la nieve durante el invierno… los usos de una carpa para jardín son muchas, tantos como alternativas ofrecemos en Aracarpas.

 

Si dispones de un jardín y crees que no le estás sacando suficiente partido, te invitamos a que pienses en las posibilidades de montaje y uso de una carpa para jardín en tu recinto. No importa que tu jardín no sea demasiado grande, en Aracarpas ofrecemos diferentes materiales, diseños y dimensiones para que des con la carpa de jardín más adecuada para ti, sin olvidarnos de las siempre funcionales jaimas.